Lila Rose empezó a dar forma a la iniciativa Live Action cuando solo tenía 15 años. Después de descubrir un libro con fotos de niños abortados, se sintió movida a contar a otros jóvenes lo que el aborto provocado le hace a un niño no nacido. Junto a un pequeño grupo de amigos empezó a dar charlas en colegios y otros foros de su ciudad.

Cuando empezó sus estudios en la Universidad de Los Ángeles cayó en la cuenta de que no veía estudiantes embarazadas en el campus a pesar de saber que muchas de sus compañeras se habían quedado embarazadas.

Para averiguar qué recursos y apoyo se ofrecían a las estudiantes embarazadas en la Universidad, se hizo pasar por una en una. La enfermera que le atendió le dijo que Universidad no ofrecía ningún apoyo a las estudiantes embarazadas y le recomendó que abortara.

Esta primera investigación dio lugar a la iniciativa Live Action, que se ha convertido en una de las principales organizaciones pro-vida en Estados Unidos y el mundo.